Temporada de certámenes, tiempo de hipotecar mi vida en post de persegir un sueño que cada mes parece más capricho que sueño... en fin, poca gente lee lo que escribo -no son más de 5- pero no quiero que mañana sean 4, así que acá va algo viejísimo, escrito en años ancestrales, inspirado en un flautista desafortunado...
Juan Paja -genio renacentista-
Juan Paja es un hombre bueno, demasiado bueno para este mundo de porquería. Juan tiene 32 años y aún es virgen, de hecho, la experiencia más cercana a lo erótico que Juan a tenido, fue ver como, en sexto básico, Anita, la niña que le gustaba, se besaba con su pololo (un niño bonito, no como Juan...).
Juan paga el diezmo, como no tiene religión definida, le da el dinero a un hombre que alguna vez conoció vendiendo seguros, este hombre le asegura que deposita su dinero en la cuenta del Hogar de Cristo.
Los amigos
Juan es de pocos amigos, una vez, cuando niño, tuvo uno. Juan tiene una iguana, o tenía... no recuerda bien que pasó con ella... por las dudas, aún le compra comida, tampoco recuerda que le gustaba comer, Juan le compra Whiska´s.
Tiempo libre
Juan no ve televisión, lo encuentra banal, Juan Paja lee el diario, pero no lo concerniente a la farándula, la política o el deporte, no, Juan lee la página de defunciones, la lee para comentarla con su iguana cuando ésta se digne a regresar; también lee el horóscopo, no recuerda la fecha de su cumpleños, por lo que lee todos los signos.
Oficio
Juan estudió "licenciatura en física cuántica reincorporativa" y "tarot" (ambos por correo, a Juan le da miedo salir a la calle), tampoco ejerce, Juan trabaja en un asilo que está junto a su casa, el trabajo de Juan consiste en botar los pañales de los ancianos y repartir, en los platos de comida, las distintas pastillas que cada anciano debe tomar; a veces Juan se porta mal y no se lava las manos entre cada tarea.
La familia
Juan no tuvo hermanos y tampoco conoció nunca a su padre; su madre le contó un día, cuando ya tenía la edad suficiente para escuchar palabras fuertes (30 años), que una vez un hombre #¿@€& en frente de ella y la dejó embarazada (de ahí el apellido de Juan). Juan va a ver a su madre todos los días, le lleva flores (lirios) porque sabe que le gustan, Juan la saluda siempre con un fuerte abrazo y un beso, le cuenta de su vida, sus alegrías y sus penas, Juan le pide consejos y luego se va, antes de que oscuresca porque Juan Paja le teme a la noche; eso sí, antes de irse, limpia bien el nombre de la lápida y se despide del guardia del cementerio...
Su look
Juan es delgado, lleva el cabello corto y con gel, se peina hacia adelante, tal como le gustaba a su vecino, aquel que una vez trató de besarlo. Juan es de una blanquez absoluta (Juan le teme al sol); a veces se pinta una uña del pie, la cual cubre rápidamernte con un calcetín y un zapato, por "travesura" dice él.
La vocación
A Juan le molesta el desorden y la suciedad, Juan sube al segundo piso de su casa y mira los techos con cinc desteñido de las casas de al lado, Juan cierra los ojos y sueña con algún día ser presidente y arreglar todos esos techos; el techo de la casa de Juan tiene 13 goteras, pero es hermoso... Juan juega a que él es Andrés Bello y escribe nuevamente el código civil (ya ha transcrito 9347 páginas).
Juan es un hombre feliz, toca la flauta, no le arranca sonido alguno, pero la toca...