Sábado 1 de octubre, 2004; IIº Congreso Nacional de Estudiantes de Medicina y Derecho; Jornada de clausura; Facultad de Derecho (esta debió haber sido mi casa de estudios, pero como muy bien sabe Tassara, nada sacamos con tener... sin... y después andar llorando por ahí con arrepentimientos tardíos)
Para variar llego tarde, no importa, estaba entretenido en otro lugar... me siento al fondo, en galería... no hay mucha gente, de hecho hay varios asientos desocupados adelante, pero prefiero estar acá, soy tímido.
Una señora habla de un tema desconocido, no escucho nada, nadie la escucha, pero todos asentimos (grupo de cucarachas mentirosas) ...en fin, la señora hace un gesto, parece que se despide, aplausos, flores y hasta besos (ese fui yo). Dice que quiere compartir el reconocimiento con su papá, se acerca hacia Gandhi que está sentado un par de puestos más adelante, en una butaca claramente más cómoda que la mía... el hombre debe rayar en los 300 años... así se verá Jorge a los 29.
Discursos vienen, discursos van, un hombrecito quiere exponer su trabajo, yo quiero irme... quiero volver al lugar donde estaba... comienzo a divagar, me pregunto qué estará haciendo el Chino Ríos en este momento..., por qué Salas no hace goles por la U?, por qué don Gabriel se parece tanto a Zamorano?... don Gabriel me dijo negrito... seguramente él es caucásico, ario... todo un elfo el pedazo de mierda... (perdón por esa última palabra, en cuanto aprenda a 
ocupar estos botones la borro); pienso en la Cony Moya, quién iba a pensar que iba a salir en televisión? quien iba a pensar que iba a asaltar esa farmacia en Lumaco?... pienso en que Tassara está pololeado, se lo merece, ojalá sea muy feliz... la gente aplaude: se acabó el congreso!
No recuerdo bien que sigue... los recuerdos son borrosos, con algo de olor a naftalina... lo sé porque recuerdo a Daniel bailando tap sobre una mesa... él no haría eso, sobretodo porque no tiene ninguna pierna... también recuerdo a un oso polar comiéndose a la viejita que hablaba (tal ez eso si haya pasado)... y Santa Claus... no, a él no lo recuerdo...
En fin, de pronto estoy junto a la puerta, sale gente conocida y des-conocida, entre tanta cara veo que una me ignora, la busco, se gira, no sé quien es, no la conozco... si tan solo pudiese recordar... si!! mi querida compañera Mª Olivia!! que alegría verla y volver a mirar sus ojos sin que estos me digan "soy-mejor-que-tú-pequeño-bastardo-irresponsable"... hace años que no la veo, tengo que saludarla, tengo que seguir enmendando aquel error por el que alguna vez me disculpé públicamente en clases de filosofía (curioso curso dictado por monsieur Fifi)... me acerco, necesito ser cortez-odioso... que me vea... que recuerde que alguna vez le gusté...
- Olivia!
- ah?!
- Olivia, tanto tiempo, como has estado?
- ah?... eh... Santiago?
- que buena... encontarte acá...
- sipo, quien se lo hubiera imaginado... (eso es lo que dice, pero realmente piensa: "obvio pendejo, yo también estudio medicina, que no se te olvide cabrito me-di-ci-na")
- como has estado?
- bien, super bien (mentira, leo la tristeza en ella... además, me mantengo informado...), disculpa, me tengo que ir (huye... aún le gusto...)
- oka, cuidate, nos estamos viendo
- si, que rico haberte visto
- igual... chao
En fin... tal vez no nos veamos en mucho tiempo... pero algún día nos volveremos a encontrar, ambos somos muy orgullosos como para dejar que el otro lo logre sin que nosotros lo hagamos también... y cuando volvamos a vernos, ella lo recordará como lo recordó hoy y como lo hará mañana... el anillo es mío...
Nota: los nombres han sido cambiados para proteger la identidad de los personajes... principalmente la mía que es la única que importa...
