Hoy recordé lo que es tener un mal día... por culpa de un grupo de narcisistas ego-maníacos pasaré otra semana sin ver a mi familia, peleé con mi hermano Andrés (hermano solo por parte de abuelo... larga y complicada historia), me enteré de que ya no soy parte de "los niños exploradores", viví un doloroso re-encuentro, tuvimos un mal entendido con las niñas de ayudantía, la influenza me está matando lenta y dolorosamente... así podría seguir un par de líneas, pero no hace falta, como diría Tassara, tarde o temprano tenía que empezar a pagar...
En fin, mejor recordar algo agradable, esto pasó hace algunos días... "gordo por un día"....
A Tassara le toca comprar el pan, decido acompañarlo, para respirar aire puro, para caminar, para olvidar por un momento la miserable vida que estoy llevando; quiero cambiar de ambiente y de vida... la verdad es que no recuerdo exactamente cual fue mi razonamiento (si es que lo hubo), el punto es que me puse un cojín bajo la casaca y bajé raudo la escala, mientras Tassara dejaba escapar una risotada estruendosa que me alegró y a la vez me dio un poco de asco.
A nuestro paso la gente se detenía a mirar mi guata monumental, me aputaban, los niños lloraban... me di cuenta de que la sociedad en que vivimos es como la callampa, que los gorditos son muy discriminados y que si no hubiese adelgazado ahora sería mucho más gordo... ¿?
Me percaté además de que el hombre-gordo atrae mucho más a las mujeres, esto porque recibí 2 atrevidos piropos que no transcribiré ya que no quiero incluir contenido erótico en mi blog... ahora que lo pienso, los piropos pueden haber sido para Tassara, él siempre ha sido del gusto de viejas... y de guaguas de 2 meses...
Con cada mirada que recibíamos Tassara reía más y más fuerte, a veces parecía ahogarse, a veces su cara era tan roja como la sangre del tipo que encontramos muerto en la tina el fin de semana pasado...
De pronto divisé un grupo de jóvenes que se acercaba a nosotros, los miré bien... eran "punkies", punkies de los malos, de esos con manoplas y pantalones de cuero-medio-maracos, punkies de esos que asaltan a los niños buenos que caminan cerca del "30 y tantos" (sin comentarios).
- "Tassara, ayúdame a sacarme este cojín, si me ven así estos wns son capaces de pegarme... Tassara.... Tassara...??
Lo único que logré divizar de mi valiente y fiel amigo fue la suela de una de sus zapatillas (esas azules manchadas con pintura verde que él tiene) mientras corría ya a varias cuadras de distancia... los punkies me alcanzaron y destrozaron mi cara y mis costillas, me robaron $5.ooo.ooo que portaba en mi bolsillo izquierdo (para comprar yogurth) y continuaron pateándome en el piso hasta que perdí el conocimiento... cuando desperté me encontraba en la plaza de armas de un pueblito llamado Cobquecura, con una nota que decía: "esto te pasa por andar matando mascotas en países ajenos maldito asiático¨, lo firmaba en tal ¨Juan anónimo¨.
Ayer volví al "Basar Puyol" a comprar un par de hallullas para la once, la sra. con delantal blanco me pesó el pan, lo rotuló con el precio-bastante-caro-para-ser-pan-añejo (que es el único tipo de pan que allí venden) y se quedó mirándome mientras me dirigía a la caja... cuado salía del local me dijo: "está más delgado ud. ah? y que le pasó en la carita? se peleó con el gato? jejeje"
¡Hola, mundo!
Hace 1 año.