Desde hace un tiempo a esta parte sentí que me había tocado sufrir más que al resto, no lo sé, tal vez sea así, pero no me quejo, "el dolor purifica" decía santo Tomás de Aquino, no me quejo, no porque me guste, sino porque a alguien debía tocarle y me gusta que haya sido yo, eso me hace especial, eso me enseñó "cosas de la vida" que han servido de apoyo para mis amigos, no me quejo porque nunca he estado solo, porque la ira me hizo fuerte, porque hoy soy capaz de reírme de la vida... no me quejo porque la vida me entregó algunos placeres... y otros se los arrevaté...
- manejar solo, con la ventana abierta, el viento en la cara y un buen CD en el reproductor
- ir al campo y respirar profundo el aire del amanecer
- estar con mi papá, mi mamá y mi hermana
- caminar descalzo en la playa
- jugar con un cachorro
- reunir a la familia en navidad
- caminar solo en la noche, por la calle, por la carretera
- recordar buenos momentos
- escuchar música tendido en la cama
- abrazar a un amigo
- dar un regalo sin razón
- enseñarle a alguien más chico
- escribir por escribir
- ver una buena película
- sentir el aroma de un cuaderno nuevo
- comerse un buen pan con manjar
- tomar once con Pelao, Jorge y Tassara
- sentir la lluvia en la cara
- mirar las estrellas tendido en el césped
- reír hasta que duela
- viajar
- besar a la mujer que amas
- confiar en un amigo
- decir "te quiero" y leer en sus ojos que no hacía falta decirlo, que lo sabe y lo siente
- seguir riendo de lo que reímos hace tantos años
- hacer feliz a alguien
- despertar cada día con una nueva estupidez en la cabeza...
... son lujos que me doy, es lo que le da valor a mi vida, es lo que necesito para ser feliz...
¡Hola, mundo!
Hace 1 año.